3 dic 2011

Cumbre CELAC quiere cultivar "semilla de la América nueva"


Una treintena de jefes de Estado y Gobierno inauguraron hoy en Caracas la Cumbre constitutiva de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que nace como la "semilla de la América nueva", afirmó el presidente de México, Felipe Calderón, en cuyo país se cuajó el proyecto en 2010.
"Esta es la década de América Latina", según Calderón, el encargado de abrir la III Cumbre de América Latina y el Caribe de Integración y Desarrollo (CALC) en la capital venezolana, elegida para dar a luz este sábado un nuevo mecanismo de integración que excluye a Estados Unidos y Canadá.

Seguridad
Calderón aseguró que esta integración debe permitir "el intercambio seguro, fluido, de los bienes, los servicios y las personas" y "acabar con la pobreza y la desigualdad", así como "proteger el medioambiente".
"Unión también para poner un alto al crimen organizado y a su violencia", prosiguió Calderón, al matizar que ésta "se ha convertido en la región más violenta del mundo".
El mexicano hizo votos para que este mecanismo "sea fructífero y perdurable" y, para concluir, dejó claro que la naciente CELAC "es la semilla de la América nueva".

"Sin vacilación"
A su turno, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, defendió con ahínco el nuevo foro y llamó a los 33 países que lo integran a avanzar "sin vacilación" por el camino de la unidad.
"Vacilar sería perdernos. Avancemos sin vacilación que éste es el camino, la unidad, la unidad, la unidad", sentenció Chávez, quien encabeza como anfitrión su primer gran evento internacional tras haber sido operado de cáncer en junio pasado.
En un discurso desprovisto de protocolo y que glosó con citas de varios libros que se llevó hasta el púlpito, Chávez rindió homenaje al fallecido expresidente argentino Néstor Kirchner, al líder cubano Fidel Castro y al exmandatario brasileño Luiz Inacio Lula Da Silva. Pidió asimismo que la Declaración de Caracas, que se aprobará mañana, "pase a formar parte de los planes de trabajo diarios" y no se deje "por allá archivado en una computadora o en una gaveta como si nada hubiera ocurrido".

Respetar diferencias
Chávez insistió en la importancia de la unidad, aceptando y respetando las diferencias, "sin permitir que la intriga cunda" ni que "la cizaña venenosa vaya a impedir una vez más el esfuerzo unitario". "Ojalá los Gobiernos del norte vean un poco (...) lo que está sucediendo en América Latina y el Caribe", planteó, al aludir a los "Gobiernos que han caído en Europa" como consecuencia de la crisis económica que ha dejado, prosiguió, "millones de pobres".
Esta cumbre reunió a la casi totalidad de los líderes de la región, con la excepción de la costarricense Laura Chinchilla, el peruano Ollanta Humala y el salvadoreño Mauricio Funes, quienes se excusaron y enviaron representantes.
Todos expresaron su respaldo a la CELAC, cuya conformación fue aprobada por el Grupo de Río en Cancún en febrero de 2010, y en la necesidad de que este nuevo mecanismo discuta los problemas regionales sin la presencia de EE.UU.

"Nuestra América"
El presidente de Cuba, país que organizará la cumbre de la CELAC en 2013, tildó de "gigantesco acontecimiento" la creación del organismo e indicó que "por primera vez en la historia" se tendrá una organización de "nuestra América".
La euforia la ensombreció ligeramente el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, cuando adelantó que en el foro "falta Puerto Rico".
Asimismo aseveró que en Caracas se dictará "una sentencia de muerte" a la doctrina Monroe, impuesta hace 188 años por el expresidente estadounidense James Monroe y que apuntaló el expansionismo de esa potencia en la región.
También se pronunciaron las dos guerrillas que operan en Colombia, el único país de América que mantiene un conflicto armado activo

Y desde Washington, el portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner, sentenció que la Organización de Estados Americanos (OEA) es "la organización multilateral preeminente que habla por el hemisferio".


FUENTE: El Nuevo Diario (Nicaragua)